¿Qué son los retiros? Esta fue la primera pregunta que nos hicimos cuando nos anunciaron que nos íbamos a pasar una semana en una gran casa con los amigos y compañeros del salón, así como una convivencia.

Sinceramente para muchos de nosotros fue una semana en la cual disfrutamos, lloramos y quedamos en paz con nosotros mismos, creo que lo mejor de los retiros es la paz personal en la que nos encontramos todos al final de un largo proceso de actividades que nos hacen reflexionar de modo que todos nos podamos sentir de la mejor manera.

El pasado martes 4 de marzo partimos en busca de tener esa experiencia espiritual que, aunque no lo pareciera, todos buscamos. Cuando llegamos al punto de encuentro Casa de Nazaret quedamos impactados por la hermosa vista, por el buen diseño de la casa en la que nos quedaríamos durante lo que quedaba de semana.

Al principio era lo típico: explicar normas, horarios, nos mostraron las habitaciones y demás y luego comimos una deliciosa cena con todo lo que a muchos nos gusta aunque… “no hay chocolate” –Ramón.

Y desde ese momento se dio por hecha la apertura de los retiros. Aquella noche en la cual estábamos nerviosos, inquietos y felices pues sabíamos que iba a ser una semana que jamás olvidaríamos.

Durante el resto de días experimentamos lo que se siente expresar nuestros sentimientos, exponer nuestros corazones y ver cómo son nuestros compañeros, haciendo que el salón se uniera como nunca lo hubiéramos pensado.

A pesar de estos momentos de tristeza y emoción, de zozobra y tranquilidad, por primera vez nos sentimos unidos los unos a los otros luego de conocernos mutuamente y de una manera más profunda que superficial.

Para finalizar deseo comentar que más que un paseo o convivencia, los retiros son una experiencia que todos tendremos en nuestros recuerdos al decidir ser quienes queremos ser y como queremos ser, pues de eso se tratan los retiros.

Por: Juan Andrés Rodríguez Carrillo, estudiante del curso 9A