El pasado martes 21 de agosto varios grados del colegio Calasanz Cúcuta, tuvimos la oportunidad de asistir a varios colegios oficiales a prestar servicio social a todos estos niños de escasos recursos, esto me dejo ver el verdadero espíritu calasancio, el ver como compañeros que aunque nunca prestaban mayor atención a las cosas que pasan a su alrededor, le ponían toda su atención a las necesidades de estos niños, o al aporte económico que hicimos cada uno de nuestro salón 9°A para llevarles un refrigerio a estos pequeños o el de aquellos, que no pueden ni con la responsabilidad de una tarea inventando los juegos más rebuscados para mantener entretenidos a los niños. Por esto y otras razones, calificaría a esta actividad de fantástica o por lo menos transformadora, no solo por saciar nuestra alma con la alegría y cariño tan inmenso que nos ofrecieron todos estos pequeños estudiantes, si no también para darnos cuenta de nuestra realidad, ver que es la desigualdad, la corrupción, entre otros problemas que sufre la educación gratuita en nuestro país.
Dijo alguna vez Rousseau a las plantas se les endereza con cultivo a los hombres con educación Así la educación para estos niños es una de las únicas escapatorias de su realidad, además una de sus únicas oportunidades para lograr completar sus estudios o tener una buena oportunidad laboral en el futuro, Pero aún más allá de eso, para nosotros como estudiantes del legado de san José de Calasanz es una muy buena forma de entender su llamado a servir a los demás, tal y como lo dijo En cuanto a recibir alumnos pobres, obra usted sanamente admitiendo a cuantos vienen. Porque para ellos se fundó nuestro instituto. Y lo que se hace por ellos se hace por cristo..
Así para terminar ya elogiados los niños participes y a nosotros los estudiantes, le quiero dar gracias al colegio por permitirnos tener estas actividades, que reflejan la importancia de la piedad en el refrán de piedad y letras, por esto espero que estas actividades se sigan impulsando y sigan tocando cada uno de nuestros corazones calasancios para que en un futuro podamos lograr no solo un país, sino un mundo mejor para todos los seres que lo habitamos, con menos desigualdad y más educación, como definitivamente querría no solo Rousseau si no tambien el mismísimo san José de Calasanz.
Tomás Enrique Víctor Antolinez Cuadros
9°A